El Noroeste Argentino (NOA) es una región que comprende las provincias de Catamarca, Jujuy, La Rioja, Salta, Santiago del Estero y Tucumán. Con una población de aproximadamente 5 millones de habitantes, el NOA es considerado la región más antigua y cohesionada de Argentina. Su personalidad regional se remonta a las poblaciones autóctonas que habitaban la zona antes de la colonización española.
La influencia de los pueblos originarios
El territorio del NOA estuvo habitado por los Diaguitas y Calchaquíes, pueblos agroalfareros que cultivaban diversos cultivos como maíz, poroto, quinoa y papa. Además, criaban camélidos y aprovechaban su lana, carne y los utilizaban para la carga. Estas comunidades tenían una profunda conexión con la naturaleza y rendían culto a la Pachamama (madre tierra), Yacumama (madre del agua), Inti (dios del sol), Huairapuca (dios del viento) e Illapa (dios del trueno o relámpago).
La influencia de los pueblos originarios en la región se puede apreciar en la actualidad a través de su cultura, artesanías y tradiciones, que se mantienen vivas en muchas comunidades del NOA.
La biodiversidad del NOA
El NOA se caracteriza por su amplia variedad de climas y suelos, lo que ha dado lugar a una gran diversidad de flora y fauna en la región. Desde climas per-húmedos, con excedentes hídricos superiores a los 1000 mm anuales, hasta climas áridos con déficit de agua durante todo el año, el NOA alberga una gran variedad de ecosistemas.
En un recorrido de menos de 300 km en el NOA, se pueden encontrar diferentes paisajes como la Llanura Chacopampeana, la Selva Basal y Tucumano Oranense, los Bosques y pastizales de altura y el Pedregal de las Altas Cumbres. Estos diferentes ecosistemas albergan una enorme biodiversidad y ofrecen un gran potencial para múltiples actividades productivas.
Flora del NOA
La flora del NOA es muy variada y se adapta a los diferentes climas y suelos de la región. En las zonas de clima húmedo se encuentran especies como el algarrobo, el quebracho, el lapacho y el palo borracho. En las zonas de clima seco y árido predominan los cactus, como el cardón y el cactus columnar, así como también la jarilla y el chañar.
En las zonas de montaña, se encuentran especies adaptadas a la altura como el queñoa, el aliso de río, el molle y el pino del cerro.
Fauna del NOA
La fauna del NOA también es muy diversa y se adapta a los diferentes ecosistemas de la región. En las zonas de montaña se pueden encontrar especies como el cóndor andino, la vicuña, el guanaco y el puma. En las zonas de selva y bosques se encuentran especies como el yaguareté, el oso hormiguero, el tapir y el pecarí de collar.
En las zonas de llanura y pastizales se pueden encontrar especies como el ñandú, el carpincho, el aguará guazú y el ciervo de los pantanos. En los ríos y lagos del NOA se encuentran especies como el dorado, el surubí, la boga y el pejerrey.
El potencial de la bioeconomía en el NOA
La economía del NOA se basa principalmente en actividades primarias y en el procesamiento de productos agropecuarios. La caña de azúcar es uno de los principales cultivos de la región, pero también se destacan otros productos como los cítricos, las frutas tropicales, las frutas finas, las hortalizas, los olivos, los vinos de altura, la papa y los cultivos andinos.
El desarrollo de un modelo bioeconómico regional en el NOA podría promover la innovación, la creación de recursos estratégicos y un uso más sustentable del territorio. Además, podría agregar valor a las actividades productivas y generar empleo en la región.
El Noroeste Argentino (NOA) es una región con una gran diversidad de flora y fauna, que se adapta a los diferentes climas y suelos de la región. A través de la biodiversidad y la riqueza cultural de los pueblos originarios, el NOA ofrece un gran potencial para el desarrollo de actividades productivas sustentables y la promoción de la bioeconomía en la región.
Es importante valorar y preservar la flora y fauna del NOA, así como promover su desarrollo sostenible, para garantizar la conservación de los recursos naturales y la calidad de vida de las comunidades que habitan la región.