La flor de col morada, también conocida como col ornamental, es una planta que destaca por su belleza y colorido. Aunque muchas personas la cultivan por su aspecto decorativo, también se puede consumir después de un año o más de su cultivo. En este artículo, te brindaremos todos los detalles sobre esta maravilloso planta y cómo cuidarla adecuadamente.
¿Cómo es la flor de col morada?
La flor de col morada se caracteriza por tener unas hojas más gruesas y brillantes que las coles normales. Su forma en roseta la hace parecer una suculenta de gran tamaño. Originaria de zonas con suelos calizos y salinos, esta planta tiene la capacidad de almacenar agua en sus hojas.
Una de las principales características de la flor de col morada es su espectacular colorido. Puede presentar tonos morados, blancos, rosas y verdes intensos, que se intensifican a medida que la planta madura. Algunas variedades incluso tienen colores tricolores, como morado, verde y blanco. La combinación de estos colores crea un contraste visualmente impactante en el jardín.
Es importante destacar que la flor de col morada es una planta bianual, lo que significa que vive aproximadamente dos años después de la germinación. Durante el segundo año, la planta florece y atrae a diferentes tipos de animales, como mariposas, escarabajos y colibríes, que buscan polen en sus flores.
Cuidados de la flor de col morada
La flor de col morada es una planta relativamente fácil de cuidar. A continuación, te brindamos algunos consejos para mantenerla saludable y llena de color en tu jardín:
Sustrato y abono
Esta planta requiere un sustrato fértil con buen drenaje para evitar el encharcamiento de las raíces. Es recomendable mezclar la tierra con turba, humus de lombriz, tepojal (para mejorar el drenaje) y cal para regular la alcalinidad del suelo. El abono se debe aplicar una vez al año, utilizando un fertilizante rico en fósforo y potasio, pero con bajo contenido de nitrógeno para evitar el crecimiento de hongos.
Luz y temperatura
La flor de col morada se adapta tanto a la luz directa del sol como a la semisombra parcial. Sin embargo, durante el invierno, es importante ubicarla en un lugar donde reciba la mayor cantidad de luz solar posible. La temperatura ideal para esta planta oscila entre los 15 y los 18 grados centígrados, aunque también puede tolerar las heladas.
Riego
El riego de la flor de col morada debe ser moderado. El suelo debe tener un buen drenaje para evitar el encharcamiento, ya que los suelos alcalinos no absorben bien el agua. Es importante cuidar que el agua se decante adecuadamente para evitar dañar las raíces de la planta.
Mantenimiento
La flor de col morada puede ser atacada por diferentes plagas, como orugas, caracoles y palomas. Para protegerla, es recomendable utilizar métodos naturales y caseros en lugar de pesticidas. Además, se debe evitar mojar las hojas al regar para prevenir la aparición de roya blanca.
Variedades de flor de col morada que debes conocer
Existen diferentes variedades de flor de col morada, cada una con sus propias características y colores. A continuación, te presentamos tres variedades que destacan por su belleza y que deberías considerar tener en tu jardín:
- Serie crane: Esta variedad se caracteriza por sus hojas rizadas y una amplia gama de colores, como el rosado fuerte, el rojo y el bicolor entre rosa y amarillo.
- Coral queen: Sus hojas tipo plumas destacan por su color rojo casi morado en el centro.
- Nagoya: Esta variedad también tiene hojas rizadas y se distingue por sus colores más pasteles, como el blanco, el rosado y el rojo.
No tienes que elegir solo una variedad, ¡puedes tenerlas todas! El cuidado de estas plantas es similar, así que anímate a crear un jardín colorido y hermoso donde la flor de col morada sea la protagonista.
La flor de col morada es una planta ornamental versátil y hermosa que puede llenar de color y vitalidad cualquier jardín. Con los cuidados adecuados, esta planta puede ser un verdadero espectáculo visual que atraerá la atención de todos. No dudes en incorporar la flor de col morada en tu jardín y disfrutar de su belleza durante años.